Haciendo un análisis en el parque de las madres que pululan (de padres hay menos y tampoco se van a librar) me han salido estas categorías:
-La madre pachorrona o chochona: inmutable, esa que ya puede estar su hijo ahogando al tuyo y a la vez rematándole con una pala que no se altera, no es capaz ni de decir cansinamente "Fulanito, deja de pegar a Menganito". Sus hijos suelen ser espécimenes violentos con tendencias posesivas con lo suyo y por supuesto, con lo de los demás...
-La madre/padre ausente: la primera suele estar dándole a la sin hueso con otras madres y se olvida que tiene hijos, ya se le pueden ir a la China que ni se entera. Como era de esperar tampoco se entera si su cachorro tiene complejo de Gladiador y le tira arena al tuyo en los ojos para luego hacerle un placaje digno de un jugador de rugby. La segunda variante, el padre, más que darle a la sin hueso está abstraído con las nuevas tecnologías, con el móvil, para que nos entendamos .
Conozco una variante de padre ausente de verdad, con dos gemelos de tres años y otra niña de cinco, se subió a casa con la de cinco y se olvidó que tenía dos gemelos abajo. Los gemelos dieron una vuelta completa a la manzana y por suerte, no les dió por cruzar la calle... Juro que es verídico y lo viví en primera persona.
-La madre egoísta: y con razón, en esta me siento plenamente identificada porque ya no me corto un pelo cuando aparece un niño de padres ausentes o pachorrones y más mayor por lo general, que los tuyos, que reparte galletas a diestro y siniestro y se emperra en quitarle la bici a tu hijo que por lo general también, es el que siempre recibe. Un NO ES TUYO, suele ser suficiente. Mis hijos comparten sus juguetes con otros niños del parque si los padres están presentes en cuerpo y alma, sino, nanai.
-L@s jugueton@s: Son especímenes raros raros, que les gusta jugar con sus niños y con los de los demás (a mi no me gusta jugar con mis hijos, lo confieso, me parece un tostón y juego por dura y pura obligación), tienen la característica de aglutinar a un montón de niños a la vez y distraerlos, y además tienen paciencia de santo. Personalmente me hacen sentir culpable (mala madre soy que no me gusta jugar con mis hijos, por dios...) y también me hacen cuestionarme si en casa, con sus hijos, siguen siendo así.
-Repartidores de leña: Está muy claro, estos a la mínima de cambio cachete en el culo, luego se extrañan cuando sus hijos hacen exactamente lo mismo que ellos. Hay que ver est@ niñ@ que incorregible, siempre pegando-mordiendo-dando patadas...
-L@s comunistas: Se emperran erre que erre en que sus hijos menores de cuatro años compartan sus cosas con los demás (yo también he sido de estas hasta que aprendes) aunque la pobre criatura llore porque no quiere dejarle su cubo favorito del Pocoyó a esa niña que no conoce de nada.
Y ya continuaré en otra ocasión con este "estudio" antropológico que ahora me está entrando sueño y me voy a poner el modo "madre ausente" (es un decir).
2 comentarios:
Jajaja, me he reído mucho con esta entrada, qué razón tienes!!! y como dices, aún te quedan algunos por defiir. Por suerte yo me voy librando de parque, pero cuando voy lo termino pasando fatal.
jajajaja
Voy a tener que leerlo de nuevo a ver qué tipo de madre soy...
Bss,
Inma
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