Me contaba mi madre que una de las primeras canciones que recordaba haber escuchado era el Amor brujo de Manuel de Falla cantado por una tal Conchita Supervía. Mientras sonaba en la radio mi abuelo Vicente susurraba misteriosamente a mi abuela Loreto: “aquesta dona està morta” y mi pequeña madre se estremecía de miedo confusa, preguntándose cómo esa mujer muerta cantaba en la radio… A falta de videoclips musicales, puesto que en la España de aquellos años, precursora del “Cuéntame” no había llegado la tele, se la imaginaba cantando y bailando rodeada de otros muertos en medio de un infierno de fuego…
Con certeza no sé que edad tendría mi madre pero como mínimo 5 años, puesto que según la Wikipedia, la mezzosoprano Supervía falleció el 30 de marzo de 1936.
Mi madre debería haber sido coreógrafa de Hollywood por lo menos… Las imágenes que llega a transmitir una buena partitura a una mente infantil son asombrosas, ahora rescato esto de youtube y supongo que no dista mucho a lo que mi madre veía en su cabeza.
Yo sí tenía TV pero la película Fantasía sólo podía verse en cines. Toni, mi hermano mayor, tenía el disco de la banda sonora, y yo sin ver una solo fotograma de Mickey Mouse trajinando agua en el aprendiz de brujo me hice una idea aproximada de la escena.
2 comentarios:
Qué bonito es imaginar las cosas y no tenerlas tan explícitas que no den lugar a la imaginación. Qué grande es la mente de un niño!!!
La imaginación es lo más grande que existe, me encantó leer estas historias que has contado!
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